¿Y por qué amarillo?

La psicología del color en marketing influye en la percepción y decisiones del consumidor. Elegir una paleta adecuada fortalece la identidad de marca, genera confianza y mejora la recordación visual

Cuál es la psicología de color detrás de una marca

Esta pregunta me trae muy buenos recuerdos de la etapa en que estaba trabajando la imagen de marca de mi consultora, desde el naming hasta la identidad corporativa que quería impregnarle. En el proceso, mostraba el logo y el nombre a diferentes personas para obtener su feedback, vendiendo de manera racional el diseño y la paleta de colores de marca. Pero cada vez que regresaba con un amigo muy querido, me hacía la misma pregunta:

"¿Y por qué amarillo?"

Al principio, respondía con paciencia, explicando la estrategia de marca detrás de la elección. Sin embargo, después de escucharlo tantas veces, me pregunté si no me estaba explicando bien o si simplemente se había convertido en una broma entre nosotros. Simpáticamente, fue lo segundo.

Una mañana, mientras caminaba por una de las calles más hermosas de la ciudad, en plena temporada de árboles multicolores, vi un árbol que captó mi atención. No era el más alto ni el más frondoso, pero destacaba por sus brillantes flores amarillas. Se trataba de un matilisguate o lapacho amarillo. En ese instante, volvió a mi mente la pregunta y la respuesta que había dado. Supe que tenía que escribir sobre este proceso tan importante de creación de marca y, desde luego, sobre mi propia marca.

Además, siempre he sentido una profunda admiración por la naturaleza y el efecto hipnótico que me producen sus colores. Me fascinan las flores como las rosas, los tulipanes, las gerberas y los girasoles. Su esplendor natural es innegable, pero el color sin duda potencia su belleza y refuerza mi admiración por un creador sobrenatural y misterioso.

Sumaré otra anécdota. Un amigo creativo, con mucho reconocimiento en el mundo del branding, colaboró en la creación del logo y, al inicio, no le gustaba el amarillo. Sin embargo, después de varios meses de verlo en acción, regresó y me dijo: "No me había dado cuenta, pero entre tanta saturación publicitaria, no cabe duda de que es un color que resalta mucho." Sonreí con satisfacción.

El branding tiene una dimensión racional, pero también una emocional. Todos trasladamos un poco de nuestras vivencias y aspiraciones a nuestras marcas, buscando dejar un legado en lo que hacemos.


La psicología del color en el branding

La psicología del color no es un capricho estético, sino una herramienta estratégica que influye en la percepción y el comportamiento del consumidor. Los colores transmiten emociones, generan asociaciones y refuerzan la identidad de marca. No se trata solo de una preferencia personal, sino de una decisión basada en el impacto que un color puede tener en la audiencia.

El amarillo es un color que grita: "¡Volteenme a ver!". Esa capacidad de destacar y atraer miradas es exactamente lo que lo convierte en un color poderoso en el mundo del marketing y el branding.

El significado del color en el branding

Cada color transmite un mensaje distinto. Por ejemplo:

  • Verde: Sugiere naturaleza, sostenibilidad y tranquilidad.

  • Negro: Evoca lujo, sofisticación y exclusividad.

  • Azul: Transmite confianza, profesionalismo y seguridad.

  • Amarillo: Asociado con felicidad, creatividad y optimismo, además de ser un imán para la atención.

Dependiendo del perfil del consumidor, ciertos colores pueden ser más o menos efectivos. Por ejemplo, en mercados infantiles predominan los colores vibrantes, mientras que en el sector financiero se priorizan tonos sobrios como el azul y el gris.

El amarillo está relacionado con la felicidad, la energía y la creatividad. Nos recuerda la luz del sol, estimulando nuestra mente, cuerpo y emociones. Además, es un color que genera una percepción de optimismo y dinamismo, características que quise impregnar en mi marca.


El impacto del color en la identidad visual de una marca

Las marcas más icónicas han sabido aprovechar el poder del color para posicionarse en la mente del consumidor. Pensemos en:

  • Coca-Cola y su rojo vibrante, asociado con la energía y la pasión.

  • Facebook y su azul, que transmite confianza y profesionalismo.

  • McDonald's y su amarillo, que evoca felicidad y estimula el apetito.

Estas elecciones no son casualidad, sino el resultado de estudios sobre la percepción del color y su influencia en la toma de decisiones. Cuando una empresa no tiene una paleta de colores bien definida, corre el riesgo de perder consistencia visual y, por ende, reconocimiento de marca.

Un color mal seleccionado o utilizado de manera inconsistente puede generar confusión en la audiencia e incluso alejar a los clientes potenciales. Por eso, definir una identidad visual clara es clave para cualquier marca que quiera destacar y consolidarse en el mercado.


El Brandbook: La guía esencial para la identidad visual

Aquí es donde entra en juego el Brandbook, un documento esencial para cualquier empresa que busca coherencia y profesionalismo en su identidad visual.

Un Brandbook bien estructurado establece:

  • Uso correcto de la paleta de colores de marca.

  • Tipografías y su aplicación.

  • Estilos gráficos y diseño de logotipo.

  • Lineamientos para redes sociales, presentaciones corporativas y material publicitario.

Un Brandbook asegura que cada pieza de comunicación mantenga la esencia de la marca, sin importar el canal o formato. La falta de un manual puede traducirse en una imagen corporativa fragmentada y poco memorable.


Entonces, ¿por qué amarillo?

La psicología del color amarillo A estas alturas, es claro el racional detrás de la paleta de colores de Smartketing. Pero desde un prisma más personal, el amarillo también me trae recuerdos de luz, crecimiento y energía. Además, tengo una profunda admiración por la naturaleza y su capacidad de inspirarnos.

El amarillo, para mí, representa un color lleno de vida y dinamismo, un color que impulsa y proyecta optimismo.


Conclusión: El color como estrategia de branding

El color no es solo una cuestión de diseño; es una estrategia de marca. Una paleta de colores para marca bien definida y documentada en un manual de marca no solo facilita el trabajo de diseñadores y equipos de marketing, sino que fortalece la identidad visual, genera confianza y mejora la recordación de marca.

  1. Así que, la próxima vez que te preguntes "¿Por qué amarillo?" o cualquier otro color, recuerda que detrás de esa elección hay mucho más que una preferencia personal: hay una estrategia pensada para conectar con la audiencia y hacer que la marca perdure en su memoria.